¿De qué manera la utilización de un programa sociocultural ayuda al diseño de actividades pedagógicas mediadas por tecnología digital, así como la evaluación de dichas actividades y de las políticas institucionales y educativas que las sustentan? Sin duda el ámbito educativo viene siendo constantemente transformado por los vertiginosos avances tecnológicos, dichas herramientas en este tenor son llamadas Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC). En el aula reabren y profundizan el debate sobre la naturaleza del aprendizaje, la función del maestro, y la estructuración de actividades alrededor del currículo Fernández (2009a); por lo que tiene que influir en la filosofía y pedagogía del docente. Entonces, el aprendizaje tiene que verse en cierta manera con el gran resultado que tiene el sujeto de su participación en las relaciones sociales existentes y la relación que guarda con las herramientas culturales. No sólo el lenguaje que es el instrumento más importante Lacasa (2002), sino los dispositivos digitales que entran en juego ahora en la nueva dinámica de este proceso; son elementos básicos de la visión paradigmática sociocultural. Los cambios en el terreno educativo y específicamente en lo áulico son estructurados bajo este paradigma, donde los alumnos aprenden de todos, con las inigualables diferencias socioculturales que poseen cada uno de ellos. Por ejemplo: es cada vez más usual encontrar alumnos en las aulas con la habilidad de entender y manejar textos multimodales, con colores, dibujos, iconos y sonidos Fernández (2009), que sin duda potencializan el aprendizaje de los estudiantes, pero también motiva al docente a estructurar estas riquezas en su planeación, en la organización de sus secuencias didácticas y en la coordinación general del trabajo. Por otro lado, las TIC y el Internet no solo potencializan el aprendizaje mismo sino también abre nuevos horizontes, como el de llegar a lugares todavía inaccesible en cierta manera (zonas marginadas), la realidad de la Educación a Distancia (E a D) y la creación de salones de clase con alumnos en diferentes regiones del mundo Alanís (2007), lo que sin duda enriquece los aprendizajes, las habilidades y las competencias. El uso en la vida cotidiana de estos dispositivos o herramientas tecnológicas, las nuevas modalidades de educación y de aprendizaje como el móvil, entendido como el uso de la tecnología móvil o inalámbrica aplicada con fines educativos para brindar un mayor soporte que exigen los diferentes procesos de enseñanza aprendizaje Burgos & Lozano (2007), sin duda están formando parte de una nueva cultura en la que estamos inmersos. Todo esto se puede conjuntar armónicamente en las llamadas comunidades de aprendizaje, donde todos los sujetos inmersos en ella adquieran un compromiso mutuo, donde haya una verdadera cohesión y participación, que los objetivos y actividades sean comunes Muñoz (2008). Esto no solo permitirá la creación y el acceso a nuevos aprendizajes, sino a su valoración de manera conjunta, es decir, habrá para ciertas comunidades educativas la ponderación de ciertas herramientas sobre otras, la combinación de elementos funcionales para ciertos objetivos, entonces habrá una selección de herramientas, una adecuación de dispositivos y cierta manera de interactuar con ellos. Lo difícil todavía para muchos, es el acceso a este tipo de tecnología ver Alanís (2007), sobre todo cuando señala que el surgimiento de dispositivos más rápidos, con mayor capacidad de almacenamiento y que esto abarata y posibilita más fácilmente al acceso al público en general por su abaratamiento, pero no lo es para todos. En el terreno docente esto es muy importante, hay lugares donde tanto docentes como alumnos conocen y dominan tecnología digital de punta como tables, Smartphone, iPads, dispositivos de audio y video portables. Por otro, existen docentes que se les está “alfabetizando” en la exploración y manejo de un ordenador de escritorio, entonces existen enormes desventajas de su utilización en el aula. Ante esto se sugiere la actualización o profesionalización docente en el manejo de las TIC, no solo como la necesidad de movilización en una cultura y una sociedad dinamizada por esta tecnología, sino también para encauzar acertadamente a los alumnos en el manejo y acceso a la información que posibilitan estos aparatos, a la par que se apuntala la motivación y el propio proceso enseñanza – aprendizaje. Como medidas políticas – educativas, existen ya dependencias o instituciones que exigen a los docentes su acceso de manera virtual, para realizar trámites, solicitar información, registro y validación de procesos, esto deja ver que los docentes por necesidad tienen que ir adquiriendo poco a poco estas habilidades digitales. Finalmente se puede concluir que, mientras más dispositivos digitales surjan y existan con más funciones, mayor será la influencia directa que tenga en la educación e indirecta al endoculturar y culturar a los sujetos que ingresen en nuestras escuelas, por lo que los docentes no solo tendrán que entrar en el juego de conocerlos y manejarlos; sino también que adoptarlos como posibilitadores y enriquecedores del proceso enseñanza aprendizaje del que ya no es el sujeto principal, sino que ahora tendrá que ser centrado en el alumno, que cada vez más se ve influenciado por instrumentos de movilidad social. Referencias Alanís. M. (2007). ¿Hacia dónde nos dirigimos?. Evolución de la tecnología y sus efectos en las organizaciones: en Lozano, A. & Burgos, V. Tecnología Educativa en un modelo de Educación a distancia centrado en la persona. México: Limusa. Burgos, V. y Lozano, A. (2007). Comp. Tecnología Educativa; en un modelo de educación a distancia centrado en la persona. D. F.. México: Limusa Fernández (2009). Aprendiendo a escribir juntos: multimodalidad, conocimiento y discurso. Comité Regional Norte de Cooperación con la UNESCO, A.C. y la Universidad Autónoma de Nuevo León, Monterrey. Fernández (2009a). Las tecnologías de la información y la comunicación desde la perspectiva de la psicología de la educación. En: Arévalo & Rodríguez, Edits. México.D.F. México: SEP/Dirección general de materiales educativos. Lacasa, P. (2002). Cultura y Desarrollo. En: Herranz, P. & Sierra, P. Cultura y desarrollo. Madrid: UNED. Muñoz, A. (2008). Factores Implicados en la conformación de redes escolares con el soporte de un portal educativo: un enfoque de comunidades de práctica docente. Comité Regional Norte de Cooperación con la Unesco.